Mi experiencia para decir que el neo-advaita es un falso camino es porque se trata una exaltación por elevación hacia niveles altos del intelecto donde nos cortamos solos del Espíritu y decimos yo soy eso. Mientras que en la verdadera iluminación, es el Espíritu quien desciende y nos transforma entonces ahí decimos El en mi. De joven caí en ese error de yo soy eso, y al darme cuenta fue un bajón. En cambio se siente muy distinto el Espíritu en uno, y se siente también mucha gratitud y humildad que el advaita no posee al proclamarse a si mismo Dios o innacido. Como siempre el lucifugo mete cola. En el Misterio de las catedrales Fulcanelli, nos deja una frase sobre alquimia, que también es aplicable por analogía a esto: "... quien ha saludado la estrella de la mañana pierde para siempre el uso de la vista y de la razón, pues queda fascinado por esta falsa luz y precipitado en las tinieblas".
El verdadero camino, nunca nos pide dejar de ser ego, sino sublimarlo. Lo que si nos pide es abandonar la voluntad propia y seguir la voluntad divina. Cualquiera puede decir: "no tengo ego". Pero no cualquiera sigue la voluntad divina en lugar de la propia. Volviendo al error del neo-advaita, uno para ver una iluminación real debería leer "Conversación con Motovilov".
a
Conversación con Motovilov:
No hay comentarios:
Publicar un comentario