Sucedió que un monje aun joven, alcanzo el estado de buda cuidando a unos tiernos huerfanitos en las desérticas comarcas de montaña.
Le había costado al monje la expulsión de su monasterio su compasiva acción.
Un día, dos tigres blancos del Himalaya acechando a los niños que el tan amorosamente cuidaba, saltaron sobre ellos y los destrozaron frente a sus ojos para comérselos.
Fue en ese mismo momento, el monje alcanzo el Nirvana.
Alex
No hay comentarios:
Publicar un comentario