SOBRE TUNELES DE SET

Una de las cosas que he visto de quienes se han internado por los túneles de Set, es que se han quedado anclados a una energía densa pesada casi como si se hubieran vuelto tomados por estas formas arcaicas, transformados y no en nada bueno.

Es extraño que las modas esotéricas hayan caído en estos absurdos, pero bueno, cada cual escoge su camino.

Lo he visto y he visto como todo el mundo le escapa a la energía de esa gente salvo aquellos que tienen curiosidad de volverse iguales.

Digo ¿Que necesidad hay de joderse la vida de ese modo?

Porque después, ni cuenta se dan que son ellos los que se han transformado, y terminan echándole la culpa a los demás.

Mas allá de las tendencias Lovecraftianas, de estos juegos junguianos y Setianos túneles, la magia funciona y lo que se creía solo una exploración psicológica termina siendo una realidad energética.

Kenneth Grant parece haber tomado tarde conciencia de que no deben crearse realidades psicológicas alternas, pues el orden cósmico esta dado, y no puede hacerse mucho sobre ello

¿Volver al caos? Se debe conocer que se debe volver caos y para ello hay que conocer la verdadera alquimia, que es muy lejana al facilismo de la interpretación junguiana.

El gran error de la magia psicológica es que por un lado, no es magia, por otro la imaginación es mágica, y si se cree estar jugando simplemente con las propias sombras, tarde se dan cuenta que el Árbol Qliphothico es real, que los Arc-demonios existen y son entidades ajenas a uno mismo, y que sintonizarlos en el Microcosmos, es haberlos sintonizado en el también Macrocosmos, y que encuentran una forma de retrotraernos hacia arcaicas formas torpes y caóticas que por una puerta en nuestro interior moldean nuestro Eidolon a su imagen y semejanza.

De ahi que lo Tifoniano y Setiano, era una prueba del Espíritu para el Héroe, y no un viaje al dominio de un poder superior desde el inconciente, que el Héroe vencía a la bestia pero lo hacia en una lucha reflejada en lo externo.

Que las interpretaciones neo-simbólicas de Jung, Evola, y otros, son erróneas.

El Héroe que entra en la cueva a enfrentar al Dragón, lo hace combatiendo a su enemigo en el mundo, nunca en su mundo interno. Solo debía ganar coraje y autodominio como guerrero.

Kenneth Grant abandono sus orden Tifoniana y sus ideas y se dedico exclusivamente al budismo.

Se dio cuenta a tiempo que las pesadillas de los reinos inferiores tienen mas fuerza que nuestra pequeña y endeble humanidad.

Descender al interior de la tierra y rectificar, significa extraer la sustancia viva, esencia de la materia, el Mercurio. En el Ser Humano, ese Mercurio es volátil mas no proviene de las entrañas de su Tierra, de su inconciente, sino del principio humano del deseo.

Ese mismo deseo que el budismo desea suprimir y que ni el mismo Mahakala en el negro abismo puede restituir pues los mundos de la liberación, son también mundos de ilusión y quien despierta, no desciende a la oscuridad. La Noche, no es el Abismo del descenso, y la presa comprende rapido pero tarde su error.

Así, nuestro Mercurio interno, no desciende a los infiernos, sino que experimenta un infierno al depurarse en la fase de nigrido, y que no es una fase regresiva al inconciente, al vientre o a las profundidades. Sino que es la caída de aquello que no era, para fijar su deseo hacia la voluntad suprema.

Suprimir el deseo seria muy lindo quiza, pero mortal para nuestra evolución.

"Cuando te asomas al interior de un abismo, el abismo se asoma también a tu interior”.

Friedrich Nietzsche, "Más allá del bien y del mal"

Alex