Nuestros días han de ser benditos si desde dentro irradiamos hacia fuera como un sol.
Desapegados solo nos queda asirnos a un sentimiento de amor incondicional y a nuestro SAG. Lo demás es navegar en el río de la vida, sin certezas, sin seguridad, sin rutinas, con la voluntad interna de ser, manifestando al Ser.
A imagen del sol en el cielo, el Ser ilumina nuestra oscuridad, y nos permite seguir ese viaje incierto pero el Espíritu sopla en su momento guiando donde solo El sabe.
Así, libres y desprendidos transitamos por el río de la tierra y el río de los cielos.
Imagen uno del otro, imagen también del Ser de donde todo emana.
Volviendo a nuestro origen, pero en el tiempo sin tiempo.
Alex
|
Vistas de página en total
domingo, 4 de noviembre de 2012
DE LA INCERTIDUMBRE CONQUISTADA
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario