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jueves, 15 de marzo de 2012

VLAD


Hay dramas que solo pueden contemplarse desde un lugar de situado por encima
tal como quien contempla lo molecular.
Hay historias de cual su carga es difícil describir, ya que son historias de intensidad
y la intensidad no es algo común.

Cuando nos planteamos una guerra entre un lado oscuro y otro superior, resulta que hay seres en la oscuridad que no pertenecen a una fuerza adversa, pero que han caído en la niebla abisal no por pinches tiranos ni magos oscuros, sino por dolor.

Creo, si me permiten tocar el tema del vampiro de Stoker, y si (Stoker Ledwich me lo permite ja ja), decir que la carga de la novela sobre Vlad, lleva en si algo que va mas allá de la descripción de ocultos vampiros.

La novela de Stoker habla de intensidad, si, la terrible intensidad del amor de un hombre atormentado a tal punto por la perdida de su amada, que presa de la desesperación se sume en un tormento inextinguible a tal punto que se vuelve un muerto en vida, depredador de la vida que alguna ves amo, por la voraz ansia de un dolor el cual se circula en si mismo generando una rueda de angustia de tormento eterno.

El vampiro en esta novela, si me permiten esta perspectiva, es el drama del hombre perdido por no haber podido aceptar un destino.

Hay mucho en esta novela puedo ver en ella trazos de la obra de Jacob Boehme y su descripción metafísica o teosofica de los mundos y los estados de las criaturas.

¿Cuantos de nosotros somos o fuimos Vlad?

Esperando el tiempo de reencontrarse con su dama que vuelve una ves mas para que su amor sea redención, acabando con el tormento de ese pobre ser que por fin puede liberarse.

Ronins perdidos en la oscura niebla, en una lucha sin sentido, sin esperanza,
donde nada tiene piedad y todo es sed a excepción del propio tormento que cual veneno se esparce fuera de quien lo sufre, hasta que en un momento de amorosa misericordia la Gracia establece un medio de liberar a la criatura.

Creo que esta novela arquetipica nos muestra uno de los dramas mas intensos de la humanidad, una de las enfermedades mas crueles del alma, la rebelión furiosa que ciega al mismo rebelde, condenandolo a la desesperación, pero, que mas allá de todo, existe la esperanza y la posible redención de su tormento.

Alex.

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