Es desde un par de horas antes de la salida del sol, cuando el SAG puede contactarse con la mayor profundidad, y provocar el mayor efecto.
Se puede decir que el SAG, por analogía es el precursor del Sol.
Es en el punto en el corazón, en la inteligencia del corazón, donde la acción del SAG, o Satguru, se manifiesta en plenitud a través de la intuición, parte de esa intuición llegara a la mente cerebral y dará comprensión, mientras que una gran parte quedara como intuiciones en la mente del corazón, dando certezas y avisos internos.
Se puede decir que el SAG, por analogía es el precursor del Sol.
Es en el punto en el corazón, en la inteligencia del corazón, donde la acción del SAG, o Satguru, se manifiesta en plenitud a través de la intuición, parte de esa intuición llegara a la mente cerebral y dará comprensión, mientras que una gran parte quedara como intuiciones en la mente del corazón, dando certezas y avisos internos.
Es de gran simbolismo esa antesala del amanecer, cuando se dice que hay mas oscuridad.
La difícil disyuntiva se da entre vivir plenamente desde un lado profundo y al mismo tiempo ser el observador.
Es nuestro lado observador el que es capas de alcanzar la realización
Solo cuando en nuestro interior se enciende la chispa interna. es cuando aparece el observador.
El observador, es el que realiza el verdadero trabajo interior.
Ahí descubrimos que somos ya de por si silencio, y ese silencio es nuestro verdadero ser, que se manifiesta con explosiones creativas.
Por eso señalo que lo relativo y lo absoluto son lo mismo, que solo podemos ver lo real al volvernos reales y nunca a la inversa.
Y que disfrutemos del hecho de vivir y al mismo tiempo ser el observador trabajando, hasta lograr la plenitud de lo que somos, pues al Ser, sucedemos, y no la vida nos sucede solamente.
Dejar el sueño del yo es estar mas despiertos, y el observador es quien despierta,
así luego somos.
Seria un contrapunto entre lo que alguien llamo "la insoportable levedad del ser" y aquello que puedo denominar como "la liviandad de Ser". Por supuesto, esta ultima opción, es la valida, si se quiere.
Podría resumir esto en una simple cosa. Hay dos formas de llorar. Una, por dolor, y la terrible frustración de la mente ante lo efimero de todo. La otra forma es cuando nos sobreviene la comprensión superior y las lagrimas proceden de la felicidad que otorga sentir la unidad.
Es ese observador imparcial, carente de juicios quien va abriendo el camino hacia esa unidad.
La experiencia con el SAG, sera la antesala de la conciencia del Ser.
Justamente como la oscuridad de la noche antecede al amanecer.
Alex
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